Hola majos y pajas.
Aunque segundas partes nunca fueron buenas, esta vez vamos a hacer una excepción: las dos partes malas.
La otra mala decisión que se me viene a la cabeza es..: el pospón. Es decir, POSPONER LA ALARMA DEL MÓVIL. Maldito sea el inventor, seguro que no madruga. Seguro que ni se levanta de la cama, viviendo el SUEÑO americano. Es como el inventor de las bolsa de basura, nunca tiró la basura.
Es horrible macho. Yo no sé los demás celulares (sí, llenos de células) pero el Iphone suena cada 9 minutos exactamente. Son 9 minutos en los que te da tiempo a soñar 9 sueños distintos y todos eróticos, o casi eróticos, porque cuando tienes las 9 manos diestras en las 9 nalgas izquierdas respectivamente, vuelve a sonar el móvil. Suena con una melodía diseñada para joder. Pero la elegimos nosotros: "es que si no no me despierto". Pues ala, Are You Gonna Be My Girl.
Ya vas apurado, lo sabes. Utilizas tu única actividad mental en pensar como recortar minutos: hoy no me peino, si total quien me va a ver; ña, ya desayuno en el curro; o el ya clásico bueno, me lavo así un poco y ala. Y, por supuesto, le das a posponer. Vuelve a sonar 9 minutos después. Llegas tarde. Y te cabreas. Pero no sabes muy bien cómo cabrearte, no eres capaz de admitir que la culpa es tuya, que eres un sucio posponedor.
Lo bonito es cuando ya aceptas tu condición de débil posponedor que recae siempre y calculas unos 20 minutos de margen para darle, no una, sino dos veces a Posponer. Es una actitud tipo: "ahora os jodéis que lo tenía todo planeado para darle a posponer dos veces sin que llegue tarde a clase/curro. Ajá!!"